Bueno, en realidad quien lo cuenta es el barquito, pues está redactado en primera persona por el “Corto Maltés” tal y como vivió la circunnavegación de Italia desde el agua. Era el segundo año de la pandemia por Covid-19, los países europeos empezaban a abrirse tras el confinamiento, y la principal duda era precisamente si la pandemia les permitiría finalizar la navegación o les dejaría retenidos por el camino. Pese a la gran incertidumbre soltaron amarras a primeros de junio, para regresar a finales de septiembre con su objetivo cumplido.
Fueron a La Nouvelle en un camión, desde allí contornearon toda la costa mediterránea de Francia, la península italiana hasta Venecia, y allí se introdujeron en el continente por el río Po para cerrar la vuelta a Italia en Mantova. 2.290 millas, 18 islas y 4 ríos son el balance de esa circunnavegación, contada con la naturalidad de quien el mar ha hecho humilde y se quita importancia, para transmitir a los propietarios de veleros pequeños que pueden hacer grandes navegaciones con sus barcos, e ir a sitios preciosos donde los grandes no pueden acceder.
Para ser sincero con el lector, en este caso la duración del viaje, y la incómoda meteorología del Adriático, le hicieron en algunos momentos rozar el hartazgo, lo que explica que haya utilizado como título la famosa frase de los niños cuando se cansan en un viaje: “¿Cuándo llegamos?”. Como en otros libros, el autor ha incluido algunas dibucartas, textos que se convierten en un dibujo, así como fotos aéreas y las coordenadas de los puertos visitados para poder seguir las etapas en un navegador y facilitar el viaje a quien intente repetirlo. En el texto hay palabras resaltadas en negrita, que corresponden a fotos de la navegación (más de ochocientas) que pueden verse clasificadas por los capítulos del libro en https://cortomaltes2012.blogspot.com
El libro está prologado por Antonio Doria Olaso, patrón del velero Tam-Tam y navegante oceánico.