¿Qué duda cabe de la importancia de la ortografía para cualquier autor? Saber escribir bien es un requisito que si bien se exige a cualquier persona, en aquellas personas que buscan labrarse un futuro como literatos la exigencia es mayor. Pero nadie es perfecto, los errores forman parte del día a día de todos y el mundo de la literatura no es una excepción.
La rapidez, la influencia de los nuevos estilos de escritura en redes sociales o una mera confusión pueden dar lugar a que las faltas de ortografía hagan acto de presencia. Si bien la labor del corrector y las sucesivas revisiones antes de un libro hacen prácticamente imposible la aparición de estos errores, nunca está de más repasar el nivel de ortografía que uno posee.
Por ello, en esta ocasión recopilamos varias de las faltas de ortografía más comunes en el español. Un listado que nunca está de más tener en cuenta para evitar estos errores tanto a la hora de ponerse a escribir un libro, como para redactar la lista de la compra. ¿Cometes alguno de ellos?
¿”A ver” o “haber”?
¡Ave César, los que van a errar ortográficamente te saludan! Bromas aparte, la similitud sonora entre el verbo “haber” y la secuencia preposición + infinitivo “a ver” son muy distintos. Hay que recordar que el primer término suele emplearse como verbo auxiliar o como sustantivo para referirse a un conjunto de bienes. Un pequeño truco para no confundirse.
“Haya”, “halla” y “aya”
Allá que vamos. De nuevo, disculpas por la broma y, otra vez más, nos encontramos ante palabras que aunque suenan igual, son muy distintas. En el caso de “haya” no hay que olvidarse si escribimos “y” estaremos hablando de un árbol o de la primera o tercera persona del singular del presente de subjuntivo del verbo haber, .
Pero en el caso de “halla”, con “ll”, se trata de la tercera de la tercera persona del singular del presente de indicativo del verbo “hallar”, o de la segunda del imperativo de ”hallarse”.
El caso de “aya” es más fácil. Sin “h” con “y”, se trata de un sustantivo que hace referencia a una mujer encargada del cuidado de la educación de niños o jóvenes.
“Yendo y llendo”
Por si no hubiera suficiente caos con las palabras que suenan igual, que además nos inventamos otras. Si escribimos “yendo”, haremos referencia al gerundio del verbo ir, pero en el caso de “llendo” habremos utilizado una palabra que no existe.
La “s” innecesaria
Dijistes, fuistes, hicistes, escribistes, etc. Tan solo algunos ejemplos de cómo añadir una “s” al final de una segunda persona del pretérito perfecto de algunos verbos. Una muestra de que en ocasiones un error de pronunciación puede trasladarse al papel. Vigila esas letras que pueden sobrar.
“Hecho y echo”
No es lo mismo hacer que echar a alguien. Si bien en el infinitivo ambos verbos son muy distintos, en el caso del participio del primero y el participio del segundo, la similitud es casi completa… salvo por esa ”h” que distingue a ambas formas. Por supuesto, que la similitud sonora también tiene mucho que ver en esta falta de ortografía.
“Vaya” y “valla”
¡Hasta hay un chiste relacionado con esta confusión! ¿No te lo sabes, el del hombre entre dos vallas? Vaya, hombre… vaya. Ten siempre presente este chascarrillo para recordar que “valla” se refiere a una cerca y que “vaya” es una interjección que se corresponde con el verbo ir.
“Hay”, “ahí” y “ay”
“Ahí hay una persona diciendo ay”. Una sencilla regla que a todos nos enseñaron desde pequeños en el colegio. Pero, ¿recordamos para que sirve cada una de estas palabras.
Si escribimos “hay” estaremos haciendo referencia a una de las formas verbales de”haber”, pero si retiramos la “h”, haremos uso de una interjección que indica dolor o temor. Por último la palabra “ahí” hace referencia a un adverbio de lugar.
Infinitivo por imperativo
Por muy simple que parezca, cambiar una letra por otra provoca una alteración de los tiempos verbales muy común, y por supuesto, una falta de ortografía. Estamos hablando del uso del infinitivo por imperativo, es decir, escribir “ir” en lugar de “id” a la hora de dar una orden a otra persona.
Concordancia de número del verbo haber
El verbo haber es impersonal, ¿qué quiere decir esto? Que sólo admite concordancia de número cuando actúa como auxiliar. ¿Qué quiere decir eso? Que en construcciones como “habían tres personas corriendo esta mañana” habríamos cometido un gran error. Lo correcto sería “había tres personas corriendo esta mañana”.
La tilde de los monosílabos
Hay que diferenciar entre pronombres y determinantes para saber si corresponde tilde o no. En algunos casos la distinción es clara, por ejemplo, la segunda persona del singular “tú” y el posesivo “tu”. Pero en otras situaciones la pertinencia de la tilde queda menos clara.
Un ejemplo lo volvemos a encontrar en el posesivo “mi”, que llevará tilde en usos como pronombre, “me llamó a mí” y no cuando se usa en forma de posesivo, “me llamó a mi trabajo”.
Seminarios de ortografía
Nunca está de más recordar los conceptos básicos de ortografía y reforzar lo ya aprendido. Por este motivo, desde ExLibric organizamos varios seminarios dedicados a esta temática con el fin de evitar faltas y conseguir que los mensajes lanzados por autores lleguen de una forma clara y concisa a su público.
Ya sea a través de las páginas de un libro o en una entrada de blog, una falta de ortografía hace que la información compartida pierda autoridad. Y por supuesto, si no eres escritor, también estás invitado a participar en estos seminarios para recordar las normas básicas. Porque nunca está de más reafirmar los principios que rigen el buen uso y manejo del lenguaje.
Si quieres saber más sobre nuestro próximo seminario de ortografía puedes consultar más información en el siguiente enlace: https://www.exlibric.com/taller-para-escritores/ortografia-carmona/gracias/
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Un comentario
Es hasta peor cuando la gente ignora las faltas que marcan los correctores ortográficos a la hora de mandar un texto.