Juan Campos da protagonismo a las gentes de Antequera, personas con nombre y apellidos en unos casos, sumidas en el anonimato, en su mayor parte. No se trata de un clásico relato histórico más o menos lineal y continuo en su cronología, ni uniforme en su temática o contenido. Son puntuales incursiones -superficiales y sucintas en algunos casos, más detalladas y de mayor recorrido en otros- en aspectos muy diversos, básicamente políticos y sociales, del devenir histórico de la Ciudad de Antequera a lo largo de los dos últimos siglos, en mayor medida del vigésimo que del decimonono.
En definitiva, una serie de Apuntes que pretenden profundizar en determinados aconteceres de la historia de la ciudad y que en la práctica totalidad de los casos son una pequeña muestra del producto de la investigación del autor en el colosal, en cuanto a la riqueza de sus fondos, Archivo Histórico Municipal de Antequera cuyo enorme volumen documental ha llegado a nosotros gracias al exquisito celo de muchas generaciones de antequeranos que han velado por su conservación.