Las cosas son como son y no se deben expresar de otra manera.
Este poemario cuenta, agradece y denuncia en general a todos los afectados de alguna forma en esta terrible pandemia que nos ha tocado vivir.
Por otro lado, el autor incluye en este libro dos breves relatos en los que hace referencia, por un lado, a la monotonía del confinamiento y, por otro, a las dificultades de relación amorosa, con un leve sentido del erotismo entre pareja, de un matrimonio casi marchito, real como la vida misma, vinculando sutilmente ambos relatos.
El autor ha pretendido reflejar sus inquietudes, también sus miedos, intentando meterse en la piel y en la mente de las personas damnificadas por la COVID-19.