El vídeo tiene un papel fundamental para promocionar tu libro, así como tu marca como autor. El contenido audiovisual puede ayudarte de muchas maneras, en lo que a marketing se refiere. Desde permitirte crear un tráiler sobre tu obra, hasta generar material para redes sociales para captar la atención de los lectores.
Con este artículo queremos darte pautas básicas con las que crear vídeo de calidad y trabajar en la promoción de tu obra. Un pequeño curso rápido de vídeo para escritores con el que conocer las nociones imprescindibles en esta materia. ¿Quién sabe? Quizás termines hasta abriendo tu propio canal de YouTube en el que dar rienda suelta a tu talento literario.
El encuadre
El encuadre determina todo lo que entra dentro del “cuadro”, es decir, lo que se grabará. Este está delimitado en cuatro direcciones: izquierda, derecha, arriba y abajo. Lo que no entra en él es, sencillamente, imposible que se vea. Para decidir qué aparece, o no, se utilizan diferentes planos atendiendo a lo que se persigue.
Estos son los planos más conocidos y que puedes usar, atendiendo a la intencionalidad que quieras:
- Plano general: Sirve para un encuadre amplio. Es decir, muestra una gran cantidad de elementos y de una manera muy amplia. Muy útil si quieres contextualizar algo sobre tu libro en vídeos como los tráiler. Su misión es buscar un conjunto.
- Plano americano: El plano americano se llama así porque era el preferido en muchas películas del género western y se caracteriza por mostarnos a una persona de rodillas para arriba. Ayuda a contextualizar el lugar en el que se encuentra un individuo ya que la apertura del encuadre facilita que además de al protagonista, veamos su entorno.
- Plano medio: Ideal para reflejar conversaciones. Como podrás imagina, este encuadre muestra de la mitad hacia arriba de una persona. Muy recomendado para conversaciones (por ejemplo si te entrevistan, o realizas una presentación online).
- Primer plano: Este encuadre de vídeo también se denomina “plano busto” porque muestra a la persona de hombros hacia arriba. El más recomendable si persigues dar énfasis al recital de una sección de tu libro o generar cercanía con la persona que lee este fragmento.
- Primerísimo plano: Un encuadre muy descriptivo a través del que podemos ver de cerca un elemento. Por ejemplo, puedes usarlo para destacar ilustraciones de tu libro o mostrar objetos que hagan referencia a algo importante en la obra.
*Nota. Es muy importante que combines diferentes encuadres para dar un mayor dinamismo a tus vídeos. Recuerda que en el audiovisual lo estático es contraproducente.
El equipo de grabación
¿Qué necesita un escritor para grabar vídeos? Más allá de lo básico (tecnología de filmación), también vas a precisar de algunos otros artículos con el fin de garantizar un mínimo de calidad. Obviamente, a más elementos incluyas en tu equipo, mayor profesionalidad asegurarás. Aunque recuerda, tenerlos también implica saber manejarlos.
- Dispositivo de grabación: Una cámara de vídeo es el ideal, pero en los últimos tiempos los smartphones han evolucionado a una velocidad que ofrecen lentes y dispositivos de filmación muy interesantes. Por ello, aunque la cámara sea lo más recomendado, tampoco descartes realizar tomas con tu teléfono móvil.
- Trípode: Imprescindible para tomas fijas. Por muy buen pulso que tengas, el objetivo va a temblar a la hora de mantenerlo inmóvil. Además, si decides grabarte a ti mismo, ¿cómo vas a lograrlo? Por otro lado, un trípode es una gran idea para llevar a cabo los directos en Instagram.
- Gadgets para smartphones: Como hemos dicho, los móviles permiten grabar vídeo con una buena calidad. Eso sí, te recomendamos que mires varios gadgets para garantizar resultados óptimos. Un buen ejemplo es un micrófono que pueda conectarse mediante una salida Jack. Incluso podrás encontrar lentes que sujetar fácilmente y ampliar el radio de visión de la cámara de tu Smartphone.
- Iluminación: Siempre es mejor contar con un sistema de iluminación que depender de la luz natural, o la artificial en tu habitación. De esta forma podrás asegurar los mismos tonos durante toda la grabación, o jugar con los brillos y sombras a la hora de grabar, así como destacar elementos sobre otros que queden a oscuras.
- Sonido: El sonido ambiente que capta la cámara puede hacer que tu voz se tape por algo tan sencillo como una puerta abriéndose, o un coche que pase. Por ello te recomendamos que cuentes con micrófonos direccionales, como los de corbata, para asegurar un buen resultado sonoro. Eso sí, recuerda esconderlos bien o mantenerlos fuera del encuadre ya que visualmente no son muy estéticos.
La iluminación
La cámara no es como tu ojo y aunque creas que la luz que hay en el ambiente es suficiente, si miras a través del objetivo comprobarás que no. Y es que una mala iluminación puede restar profesionalidad a tu material audiovisual.
En primer lugar la iluminación puede hacer que ciertos elementos en tus grabaciones no alcancen a verse. En segundo lugar, la falta de luz hace que algunas imágenes se granulen. Y, en tercer lugar, si te excedes en la iluminación podrás “quemar” el plano y llegar a molestar los ojos de los espectadores.
Pero, además, jugar con la iluminación, puede dar como resultado sensaciones de calidez, o frialdad. Si quieres resultados profesionales, te recomendamos que tengas en cuenta estos tres aspectos:
- Luz principal: Es la que ilumina al protagonista del vídeo, lo que se quiere que se vea y destaque.
- Iluminación de relleno: Ayuda a disimular las sobras que genera el elemento al que da la luz principal. Así el contraste es menor.
- Iluminación de fondo: Permite que el encuadre no sea tan plano y añade profundidad de campo a la grabación.
El sonido
El sonido es otra clave en la grabación de vídeos. Junto a la imagen en movimiento, aporta gran dinamismo en estos productos. Por ello te recomendamos que no escatimes en este sentido y tengas en cuenta varios aspectos durante la filmación, en especial cómo vas a recoger la voz (en el caso de que hables).
Por un lado te recomendamos que cuentes con un micrófono de corbata. Estas herramientas son muy útiles para filmaciones como, por ejemplo en los que hables directamente a cámara. Por otro lado, también te recomendamos que uses micrófonos direccionales, conectados al ordenador, o grabadoras en el caso de que vayas a recoger voces en off e incluirlas en postproducción.
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