Se acaba un año, comienza otro. Es el momento de empezar a ponerse metas para cumplir durante el próximo curso. Publicar un libro puede ser uno de estos objetivos, alcanzar el sueño de ver tu obra publicada y en las manos de múltiples lectores. Pero, al igual que cualquier otro reto (empezar a hacer ejercicio, dejar malos hábitos, etc.) pareciera que nunca es el momento de ponerse a trabajar para cumplirlo.
Enero puede ser el momento idóneo para publicar un libro. No solo porque este es el mes en el que comenzar a cumplir las propuestas para los retos del nuevo año, sino porque son muchas las ventajas que puedes encontrar en esta decisión. ¿Cuáles son? Presta atención, porque lanzar una obra a comienzos de año tiene muchos beneficios.
Llegarás a todas las fechas importantes
De San Valentín, a cumpleaños, pasando por el Día del Libro, aniversarios de boda… Todas las fechas en las que suele haber regalos te esperan para que tu obra se convierta en uno de estos presentes. Enero es el punto de partida, el resto de meses una gran oportunidad.
Comenzar el año con tu libro publicado significa 12 meses de ventas y comenzar rápidamente con la promoción de tu obra.
Estarás presente en todas las ferias del libro
Publicar en enero significa que tu libro estará previsto para todas las ferias del libro que están por venir. Aunque quizás las más importantes empiecen cuando ya está bien entrado el año, te recomendamos no desdeñar aquellas más pequeñas y que pueden celebrarse en otras fechas. Aunque el público asistente sea menor, tus ventas podrían ser mayores.
Por otro lado, este tipo de eventos suelen poner menos problema a la hora de aceptar su solicitud para participar. También te recomendamos que mires otro tipo de actos en los que puedas participar, como por ejemplo.
12 meses de promoción
Tal y como hemos dicho antes, publicar en enero te brinda la oportunidad de empezar a promocionar tu libro desde comienzos de año. Frente a ti se abren todas las campañas importantes del año en las que podrás darle publicidad a tu obra, acercándoselo a los lectores. Un buen ejemplo es el de contactar con influencers para que el nombre de tu título empiece a sonar tan pronto como sea posible.
La mejor opción es crear un plan de acción que valore distintas actividades a lo largo del año. En ellas tendrás que ajustarte a las características de cada época, por ejemplo, en verano podrás usar palabras clave como “refrescante” o “vacaciones”.
Tendrás margen de maniobra
Publicar en enero te permitirá tomar decisiones para remediar posibles errores en tu libro. Si pospones el lanzamiento de tu obra, podrás encontrarte con que has llegado a diciembre (campaña navideña) sin margen de maniobra. Pero si comienzas a principios de año te será posible dar un giro de timón para corregir erratas en la primera edición, malas decisiones a nivel de promoción.
Si antes hablábamos de los 12 meses del año como una docena de oportunidades para vender, ahora nos referimos a ellos como un ciclo para trabajar a fondo en tu libro y pulir todo lo que sea necesario.
Podrás pensar en tus próximos proyectos
Si tu libro queda cerrado en enero, tendrás todo el año para seguir pensando en tus nuevos proyectos. Sin perder la pista a la obra que acabas de lanzar, te quedan meses por delante en los que podrás dar forma a estos objetivos. Quién sabe, quizás al inicio del próximo curso también puedas tener preparado otro título para lanzar al mercado y volver a beneficiarte de todos los beneficios que tienen estas fechas.