Sabes que ver publicados sus libros es el sueño de muchas personas. Y, para cumplirlo, en las últimas décadas han proliferado nuevas vías diferentes al método tradicional, desde hacerlo a través de plataformas como Amazon (con todo lo que eso conlleva), así como el surgimiento de editoriales de autoedición con las que sacar adelante una obra.
En la actualidad, la autoedición se ha convertido en una opción muy interesante, y utilizada, por autores independientes que optan por esta vía para sacar adelante su proyecto literario e iniciarse en el sector editorial. Pero, ¿qué conlleva esta decisión? ¿A qué se debe el auge de este modelo?
Definición de autoedición
La autoedición se refiere al proceso por el que un autor es quien se encarga de sacar su libro a la venta. Si bien en el modelo tradicional un escritor cede sus derechos a un sello y este lleva la batuta todo el tiempo, aquí nos encontramos con un sistema donde se gana más autonomía.
Para entenderlo mejor, el modelo tradicional es en el que una editorial “ficha” a un autor y le compra los derechos de explotación de su obra y le asegura unos royalties por cada venta de su obra. Mientras el libro sale adelante es el sello quien decide todo al respecto: portada, precio de venta, etc.
En el caso de la autoedición el autor asume más responsabilidades: es él quien elige la portada, cierra el precio de venta y es su opinión la que impera frente a la del editor. Además, los royalties que recibe por cada venta son mayores que en el modelo tradicional. En este gráfico te explicaremos cada modelo.
Modelo tradicional
Modelo de autoedición
Autoedición aplicada a distintos tipos de cosas
La autoedición, a menudo, se relaciona con el sector del libro. Sin embargo, podemos apreciarla en distintos entornos como los siguientes.
Libros
El modelo de autoedición que más ha proliferado en los últimos tiempos es el del sector literario. Gracias a este muchos autores independientes y pueden darse a conocer en el mercado del libro. Sucede cuando dicho escritor contacta con una editorial y acuerdan la publicación de su manuscrito mediante una inversión que sufragará todo el proceso: desde el diseño hasta la impresión.
Música
Si existen autores independientes, también hay músicos poco conocidos que tienen muy difícil firmar un contrato con una discográfica. De esta forma, hay numerosos estudios que a cambio del pago de un alquiler de sus instalaciones, permiten la grabación de maquetas de la que después se pueden producir varias copias que vender (previamente habiendo invertido también en carátulas e impresión de portadas).
Ropa
De nuevo, los diseñadores nobeles lo tienen difícil para que una firma de moda se fije en ellos y puedan trabajar sacando adelante sus creaciones. No obstante, en los últimos tiempos, diferentes empresas permiten que se les envíe una creatividad para imprimir en una prenda y, de este modo, poder venderlas en puestos propios, a través de eCommerce en internet, o en redes sociales.
5 ventajas de la autoedición
Podrías pensar que la autoedición es una mala idea en tanto que comienza con “pérdidas” ya que se exige una inversión inicial al autor. Sin embargo, hay varios puntos que juegan a favor de este modelo:
- Sirve para dar el primer paso: Las editoriales tradicionales no suelen confiar en autores desconocidos. Por ello, apostar por la autoedición puede servir para que muchos escritores independientes entren dentro del círculo, sean conocidos y tengan más posibilidades de ser publicados en otros sellos.
- Ofrece un mayor control: En una editorial tradicional es esta quien lo decide todo y la opinión del autor no cuenta. Sin embargo, en los sellos de autoedición, es el escritor quien da su veredicto en todo momento, desde el diseño de portadas hasta el precio final al que se venderá, o la inclusión de ilustraciones o dónde se incorporarán.
- Los beneficios que obtienes son mayores: Aunque en el modelo tradicional se cobre por adelantado (por la venta de los derechos de explotación, concretamente), se recibe menos dinero por ejemplar vendido. En este sistema el porcentaje que recibe el autor es del 10% sobre el beneficio que percibe la editorial, mientras que en el caso de la autoedición esta cifra sube al 40%.
- Aprenderás del sector editorial: Una editorial tradicional lo decide todo, por lo que el autor no se involucra demasiado en el proceso de publicación. En los sellos tradicionales es el escritor quien toma el timón y es el sello con el que publica quien le brinda varias recomendaciones que irán añadiendo conocimientos al currículum literario.
- Se afinan las ventas: El mayor control que tiene el autor le permite elegir su medio de distribución y poner los ejemplares autoeditados en lugares estratégicos, donde sabe que está su público. Mientras que las editoriales tradicionales pueden por una estrategia de envío masivo que no garantiza ventas ya que al final se trata de “matar moscas a cañonazos”.
Autoedición en el sector editorial
¿Y cómo funciona la autoedición en el sector editorial? La verdad es que existen diversas fórmulas que han crecido durante los últimos años. La primera, y más simple, es acudir a una empresa de impresión y solicitar varias copias físicas del archivo de texto que el autor haya escrito. También habría que tener en cuenta que serán necesarios servicios de encuadernación.
El gran problema de esta fórmula es que no ofrece una distribución de la obra, por la que esta tendrá que ser vendida en el círculo cercano del autor, o a través de una web que haya puesto en marcha el propio autor. Por ello, plataformas como Amazon ofrecen servicios mediante los que un escritor puede adjuntar el documento con las instrucciones de impresión y el gigante del eCommerce se encarga de producirla y hacerla llegar (a cambio, eso sí, de un tanto por ciento de la venta).
No obstante, Amazon solo ofrece plataforma de venta y distribución, no así servicios de maquetación, diseño o promoción. Esto puede causar que el libro pierda calidad al no contar con una portada profesional, o que, al no haber sido escudriñado por un experto, presente demasiadas erratas. Para ello, han surgido editoriales que funcionan bajo un modelo de autoedición editorial y con un trato casi idéntico al del sistema tradicional (solo cambia la inversión inicial que realiza el autor).
En estas editoriales, como ExLibric, los autores sí que cuentan con servicios de corrección (que revisan la obra para encontrar posibles errores), así como con la ayuda de un departamento de diseño que le propondrán varias portadas. Por otro lado, en estos sellos, también trabajan equipos de marketing que establecen un plan de promoción con el que dar a conocer el libro, e incluso organizar su presentación.
Alternativas a la autoedición
Ya conocemos la autoedición y en qué se basa este modelo de publicación. Ahora es el momento de saber si existen alternativas para valorarlas y compararlas con este sistema para saber si es lo que se busca:
- Publicación tradicional: El sistema de toda la vida: se manda un manuscrito a una editorial y, si este gusta, te harán una oferta por los derechos de explotación y, tras adquirirlos, comenzará un proceso de publicación en el que el autor tiene poco que decir.
- Publicación con Amazon: El gigante del eCommerce también ofrece un sistema para publicar tus libros y en este no tendrás que invertir. ¡Qué bien suena todo! Pero, ojo, aquí no contarás con el apoyo de una editorial, por lo que tendrás que diseñar y maquetar todo tú. Tampoco tendrás a tu disposición el servicio de corrección ortotipográfica, por lo que la calidad final puede resentirse.
- Publicar en formato eBook y subirlo a la red: Cualquier programa de ofimática te ofrece la posibilidad de exportarlo en formato PDF para subirlo a un repositorio online desde el que puede ser descargado y añadido a la biblioteca de un eBook. Una forma que también vale para darse a conocer pero que también prescinden de servicios muy interesantes e imprescindibles como la corrección, diseño y maquetación.
Autores y libros famosos que empezaron con la autoedición
La autoedición promete ser un buen primer paso para cualquier autor independiente. Pero, ¿es cierto? ¿Puede alguien alcanzar la fama tras costear la publicación de su libro? La historia demuestra que sí con el nombre de varios escritores y libros famosos:
- Isaac Asimov: ¡Así es! El que está considerado como el mejor autor en el terreno de la ciencia ficción también recibió el rechazo de muchas editoriales. No le quedó otra al escritor ruso tuvo que recurrir a la autoedición para darse a conocer… y la historia demuestra que no le fue tan mal.
- Jane Austen. La historia nos demuestra que en el pasado la mujer no tenía tantas posibilidades de publicar un libro por la misoginia del mismo. Por este motivo autoras como Jane Austen se las vieron y desearon para sacar adelante sus obras. Es por ello que la escritora de la que hablamos no solo tuvo que invertir para ser publicada.
- Virginia Woolf. La escritora británica fue un paso más allá y no solo costeó la publicación de su libro, ¡creó su propia editorial! Así es, junto a su marido, la autora creó Hogarth Press, un sello con el que se sacaron adelante libros como The Mark on the Wall.
- Ramón María del Valle-Inclán. Estamos ante una historia en donde se recurre a la autoedición no por la desconfianza de las editoriales, sino por el trato que el autor gallego mantenía con estos sellos. Es por esto, que harto de esta relación, decidió encargarse el mismo de la distribución y venta de los ejemplares que escribía.
